Durante 15 días de junio, la Sociedad Txinparta, en colaboración con la Sociedad Aranzadi y la Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra, ha llevado a cabo labores de exhumación en el cementerio de Ezkaba, junto al fuerte San Cristóbal. En esta campaña de trabajo se han expuesto los cuerpos de todos los enterrados que permanecen aún en dicho cementerio y han podido ser localizados e identificados los 131.
Se ha comprobado que dos de las tumbas estaban vacías, sin que se sepa en qué momento fueron extraídos estos cuerpos. Todos los demás poseían la botella que da a conocer este cementerio como “Cementerio de las botellas”, si bien la mayor parte de los documentos han quedado destruidos por haberse roto dichas botellas o haber penetrado el agua en las mismas. No obstante varias de ellas contenían el documento interno en buenas condiciones o, al menos, han sido suficientes para indicar un nombre o un número, a través de los cuales se ha podido reinterpretar toda la comprensión del plano que acompañaba los registros de estos enterramientos en el Archivo Diocesano.
Se ha procedido a la exhumación de 30 cuerpos, que unidos a los retirados anteriormente, suman ya 36, de los que 7 han sido entregados ya a sus familiares y el resto son objeto de diversos estudios en el laboratorio de la Sociedad de Ciencias Aranzadi. Se calcula que a final del verano se hará entrega de los mismos a las familias.
La Sociedad Txinparta continúa, mientras tanto, localizando nuevas familias y algunas de ellas están solicitando ya nuevas exhumaciones que se irán realizando en los próximos meses.
Fotos de las exhumaciones
Hola ,¿puedes explicar la historia de la caja de madera en la que pone :Fuerte 1936? .Buen reportaje ,un saludo.
ResponderEliminarPues sí Bruji:
ResponderEliminarEn realidad la caja no tiene que ver con el cementerio en sí.
Se trata del regalo de un preso del fuerte a Nieves Velasco, una señora que acostumbraba a visitarlos y a llevarles comida.
Ella siempre la tuvo sobre la mesita de noche (ya falleció)y su hijo José A. Pidal Velasco nos la trajo al cementerio para regalárnosla pues decía que nadie mejor para guardarla.
como siempre...muy buenas fotos¡¡¡ cuando tuve entre mis manos ese cofre sentí que en él había mucha historia guardada. Mi abuelo talló otro que en la actualidad lo conserva mi tía, en realidad lo hizo para ella pero este cofre está hecho de madera tallado a navaja y bastante más grande¡¡
ResponderEliminarun saludo.
muy buenas las fotos.cuantos recuerdos,gracias venencio
ResponderEliminarMuy emotiva la historia del regalo.
ResponderEliminarEl haberla conservado durante tantos años y ese destino para quien sigue trabajando por ellos.
gracias a todos los que han hecho posible que muchas familias recuperen su historia su dignidad.....
ResponderEliminaryo no tuve la suficiente fuerza para ayudar y es una cosa que me pesa despues de leer y ver todo lo que paso alli. sois muy grandes y os admiro !!!!!!
un abrazo desde mi pekeño corazon