Sigue la ofensiva ultraderechista

JAVIER ENCINAS - Sábado, 10 de Octubre de 2009 - Actualizado a las 09:34h. (Diario de Noticias)

PAMPLONA. El concejal de Nafarroa Bai en Ansoáin, Koldo Pla relató ayer con enorme tranquilidad los detalles de la amenaza de muerte que recibió el viernes por parte del Falange y Tradición. No es la primera vez que este grupo ultraderechista apunta directamente a alguien con la posibilidad de acabar con su vida -ya lo hizo con sendas pintadas a los alcaldes de Bera y Arbizu, ambos de ANV, y en el contestador del Instituto Gerónimo de Ustáriz-, pero lo novedoso de esa ocasión es que lo hicieron con una carta enviada por correo a su propio domicilio.


Pla, destacado miembro de la Asociación de Fusilados de Navarra y del colectivo Txinparta, denunció en rueda de prensa el "poco interés" de las instituciones por aclarar estos hechos y buscar a sus responsables. "Nos tenemos que tomar en serio estas actuaciones sobre todo por la libertad e impunidad con la que actúan estos cafres y la poca reacción que observamos", lamentó Pla. "Sí nos consta que parece que alguien está empezando a investigar, pero muy tarde y con pocos medios, y creemos que no puede ser tan complicado saber quiénes son los autores", añadió el edil amenazado, convencido de que "si se pusiesen los medios que se ponen para otras cosas, es evidente que habría otros resultados".

Pla explicó que, nada más recibir la misiva, trató de hablar con la delegada del Gobierno en Navarra, Elma Saiz, o con otro responsable, "pero no me quisieron poner con ella". Simplemente, le instaron a que lo denunciara ante la Policía Foral, donde entregó el original por si hubiera posibilidad de encontrar huellas o cualquier otra pista que contribuya a capturar a su autor.

"ATAQUE A LA MEMORIA HISTÓRICA" Sí tiene claro Pla que la amenaza que ha recibido en persona tiene un destinatario más amplio. "Es un ataque a la Memoria Histórica, a todos los monumentos que se han puesto y a los que vamos a poner", consideró antes de advertir que continuarán con el mismo trabajo "sin claudicar en nada".

"La respuesta a estas amenazas es la que estamos dando: si este mismo fin de semana podemos recuperar restos en otras fosas lo haremos", anunció Pla, que relaciona estos hechos delictivos con la derrota de la ultraderecha en su afán por segar la recuperación de la Memoria Histórica. "Esto surge porque socialmente se les ha ganado la partida, por muy corta que se haya quedado la Ley de Memoria Histórica, de ahí que en la mayoría de ayuntamientos ni los grupos de derecha se atreven a votar en contra en muchas de las propuestas que hacemos".
También sabe que con la exposición pública de estas acciones se da a Falange y Tradición "una propaganda inmerecida, pero la denuncia pública contribuye a que la sociedad se conciencie cada vez más".

¿PUEDEN CUMPLIR LA AMENAZA? Pla confesó no estar especialmente asustado por la amenaza, si bien le da la importancia que tiene. "No me lo puedo creer, pero tampoco me quiero tomar a broma un hecho que en sí mismo me parece muy serio por las circunstancias en que se está dando y por la reiteración de estas actuaciones", dijo.
"¿Pueden llegar a cumplir unas amenazas de este tipo?", se preguntó. "Es posible, porque son grupos muy descontrolados y de la misma forma que no tienen ningún sentido las acciones que han hecho, pudiera ser posible, aunque espero que no se atrevan", añadió.
"Lo que no se va a cumplir es que tenga a acudir a una misa en mi honor que nadie va a hacer", aseguró sin perder la sonrisa.

APOYOS: Pla compareció respaldado por las asociaciones Familiares de Fusilados de Navarra -le acompañaron en la mesa su presidenta, Mirentxu Aguirre, y Olga Arcega-, Pueblo de las Viudas de Sartaguda -estuvo Carlos Martínez- y Txinparta, que redactaron un comunicado conjunto en el que afirman que la gravedad de estas amenazas "no sólo reside en la catadura del citado grupo fascista", sino "en la facilidad con que dicho grupo puede manifestarlas" y convocar además una manifestación para el domingo en Pamplona, que "se debería prohibir debido al carácter terrorista" de estos colectivos.
Los firmantes del comunicado destacan que este tipo de actitudes nunca se permitirían en "países de nuestro entorno" e instan a las instituciones a que den a conocer las actuaciones que piensan llevar a cabo para erradicar este tipo de actos.

En todo caso, subrayan su intención de "seguir trabajando incansablemente por restituir la verdad robada, por devolver los muertos a sus pueblos y a sus familias, por recuperar el reconocimiento a las víctimas y por impulsar las ansías de justicia que ellos soñaron y ahogaron sus asesinos".