El Plural, - 20 Noviembre 2009 .Afirman que los arrestados vivían muy bien, trabajaban poco, iban mucho a la cantina, y salían de excursión de vez en cuando
JOSÉ MARÍA GARRIDO
La extrema derecha dio este miércoles el pistoletazo de salida a los actos de conmemoración del aniversario de la muerte de Francisco Franco y José Antonio Primo de Rivera. Y lo hizo por la puerta grande, con la colaboración directa de la Iglesia Católica -a través de la Universidad San Pablo CEU-, el Grupo Intereconomía, y Fuerza Nueva, el partido que fundó Blas Piñar. La excusa para juntarse era la presentación de un libro que asegura que en la construcción del Valle de los Caídos no existieron “ni presos políticos ni trabajos forzados”.
El acto tuvo lugar en la Facultad de Económicas de la Universidad San Pablo CEU, que gustosamente cedió su Aula Magna para promover teorías que atentan contra la dignidad de los miles de presos políticos que intervinieron en la construcción del proyecto faraónico que Francisco Franco ideó para pasar a la historia. Ninguno de los participantes realizó mención alguna de los centenares de personas que fallecieron mientras levantaban una cruz de 150 metros de altura en pésimas condiciones de trabajo. De hecho, intentaron convencer a los presentes de que los presos políticos que participaron en esta obra eran una especie de privilegiados que trabajaban poco, iban mucho a la cantina, y salían de excursión de vez en cuando.
“Sangre sobre la cruz”
El primero en intervenir fue Luis Eugenio Togores, vicerrector de Alumnos en la Universidad San Pablo CEU, ligada a la siempre conservadora Asociación Católica de Propagandistas. Togores se limitó a caldear los ánimos de los presentes asegurando que iban a ganar la “batalla intelectual” y no iban a impedir que echaran “sangre sobre la santa cruz del Valle de los Caídos”.
Intereconomía
Tras el vicerrector del CEU, tomó la palabra el representante del Grupo Intereconomía, Gonzalo Altozano, quien compagina su presencia en este tipo de charlas negacionistas con la dirección del semanario ultracatólico Alba (Intereconomia). En su intervención, Altozano recomendó este libro “a cualquier aspirante a periodista” sobre todo por sus dos sellos de garantía: “el de la editorial Fuerza Nueva y el de Juan Blanco”.
Piñar, Utrera Molina y cia.
Las palabras de Altozano fueron seguidas con enorme interés por las casi doscientas personas que acudieron a la presentación de esta obra. Entre ellos, cabe destacar a Blas Piñar -procurador de las Cortes franquistas que fundó el partido ultraderechista Fuerza Nueva-; José Utrera Molina -ex ministro franquista, suegro de Alberto Ruiz-Gallardón y autor de frases como “soy fiel a un pasado que estuvo tan limpio como el que representaba el Caudillo de España”-; Luis Fernández Villamea -vicesecretario nacional de Prensa y Propaganda de Alternativa Española y administrador solidario de Fuerza Nueva Editorial, SA-; José Luis del Corral -Jefe Nacional del Movimiento Católico Español (MCE) y Acción Juvenil Española (AJE)-; así como una veintena de sacerdotes, entre los que también acudió algún abad del Valle.
¿Un parque de ocio?
Pero sin duda, el momento más escandaloso de la charla llegó cuando Juan Blanco, el autor de Valle de los Caídos, ni presos políticos ni trabajos forzados (Editorial Fuerza Nueva), tomó la palabra para describir una especie de parque de ocio que muy poco se parece a lo que de verdad fue el Valle. Un gigante campo de concentración.
Por su interés informativo, reproducimos algunas de las barbaridades que Blanco pronunció, arropado por la Iglesia Católica, sus camaradas de Fuerza Nueva, y el directivo de Intereconomía. Lo hizo en la Universidad San Pablo CEU.
La cruz
- “El intríngulis (de la cuestión) es la cruz. Quitada la cruz, como han hecho en las escuelas, se acabaría el problema” (…) “La Cruz ofende a los que no creen en Cristo”.
No había presos políticos
- “Hay una manía de que eran presos franquistas, pero yo he estudiado mucho y no he encontrado preso político alguno en tiempo de Franco. Sí conocí a algún preso de conciencia”.
La generosidad de Franco
- “En el Valle de los Caídos hubo muchísimos, muchísimos, conmutados a pena de muerte” (…) Se ha hablado muy poco de la generosidad de Franco durante esos años”.
Se vivía muy bien
- “El Valle, al principio, estaba muy destartalado, no había carretera, había problemas de comida, de electricidad, de gasolina, de cemento… Había problemas enormes, pero la gente vivía muy bien. Yo estoy convencido de que había muchos obreros españoles que no vivían tan bien como los reclusos trabajadores, entre otras cosas, porque jamás les faltó comida”.
En tranvía
- “Algunos presos (del Valle de los Caídos) iban a trabajar en tranvía”.
Obreros de más
- “En el Valle había tantos obreros libres como obreros penados. Había una gran población de obreros que eran libres. Y eso nunca se dice… Para construir el Valle sobraba con los obreros libres”.
Con mucho dinero en la cantina
- “Los reclusos trabajadores cobraban más que los guardias del Consejo de la obras. Incluso, aparte del sueldo que les correspondía legalmente, las empresas les daban 5 pesetas diarias de sueldo extraordinario. Nunca les faltó dinero. ¡Así hubo los problemas que hubo en el Valle! Había unos economatos que se convirtieron prácticamente en cantinas en las que se movía el vino de una forma tremenda”.
De excursión
- “Nunca hubo una disciplina fuerte en el Valle, porque había una libertad relativa, un régimen de semi-libertad. ¡Y tanto que semi-libertad!, porque los obreros podían ir los domingos, por turnos, al Escorial, al Guadarrama (…) “No había problemas de ninguna especie, la gente entraba y salía. Había muchos que vivían ahí con su familia”.
Sólo 13 Guardias Civiles
- “El Valle de los Caídos estuvo sin Guardia Civil hasta el año 45, que llegó porque en el año 44 se escaparon 11 presos que simpatizaban con el comunismo. Se habían escapado por confusión. Se equivocaron de furgón. (…) Al final, llegaron 13 Guardias Civiles y un sargento para todo el Valle. (…) En realidad eran 12, no 13, porque uno se dedicaba a cocinar y a las labores del hogar”.
Más días libres que de trabajo
- “Nada más llegar al Valle, los reclusos trabajadores eran divididos en buenos, muy buenos y extraordinarios. Los de comportamiento bueno se les concede 3 días por 1 trabajado. Los muy buenos trabajan un día y se les concede 4. Y a los de comportamiento extraordinario, 5 por día trabajado”.
Sólo una bofetada
“No hubo malos tratos en el Valle. Bueno, sólo uno. Un día, un Guardia Civil dio una bofetada a un recluso. Al día siguiente, (el Guardia) estaba destinado en Palma de Mallorca”.
Franco, el constructor
- “El Valle de los Caídos no lo hicieron los reclusos trabajadores. El Valle de los Caídos lo hizo Francisco Franco”.
Al final del acto, se podía comprar el polémico libro y lotería con los números 1.439 / 18.736 (respectivamente, aniversario del fin de la Guerra Civil -día de la victoria para los franquistas-, y el inicio de la misma); sobre la mesa donde instalaron el ‘tenderete’ se puede leer: “Este lugar es para la generación que llegará tan alto como pueda”.
jmgarrido@elplural.com
http://www.elplural.com/politica/detail.php?id=40416
Sólo les falta decir que fueron felices en la tierra y que como sirvieron a Dios y la Santa Cruzada, son felices a la diestra de Dios padre
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